Durante varios meses estuvimos compartiendo los momentos de crisis dentro de las clases de educación musical temprana. Hoy para terminar el curso llenos de optimismo y satisfacción por el trabajo hecho me gustaría proponer el tema opuesto: momentos cumbre de nuestras clases.
Me encantaría que compartiéramos que momentos son especialmente buenos o gratificantes dentro de nuestras clases, momentos en los que nos gustaría tener una cámara ahí preparada para no perdérnoslo.
Por mi parte creo que pondría en el primer lugar un momento que se produjo en mis primeras clases con bebés. Había a mi lado un bebé de unos 15-18 meses que tenía una conexión emocional muy intensa con la música. Recuerdo que estaba cantando una canción frigia (aunque no recuerdo exactamente cuál) y reptando como pudo se acercó a mí, subió a mi regazo y se quedó muy quietecito mientras se estrechaba contra mí y se quedaba muy muy quieto, como queriendo sentir la vibración. Fue difícil continuar cantando por la emoción que me produjo. Para los que seguís mi Facebook es justamente el bebé que aparece conmigo en mi foto de perfil. Fue sin duda un momento cumbre inolvidable, de esos que marcan tu camino.
Animaros y compartir con todo/as vuestros momentos inolvidables o aquellos que más os satisface de vuestra labor.
Marisa Pérez
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